Branko Zabala, ejecutivo de Reporte Energía,enfrentado a atracadores.

FUENTE: www.eldeber.com.bo/2010/2010-12-16/vernotaseguridad.php?id=101215223536
Tweet

Tres atracos violentos se registraron entre el martes y ayer en la ciudad capital. El de mayor connotación, por el coraje y suerte de la víctima fue el ocurrido en una esquina de las calles 24 de Septiembre y Rafael Peña, donde dos maleantes atacaron a un hombre para robarle $us 18.000, pero escaparon con las manos vacías por la tenaz resistencia del afectado.
El episodio tuvo lugar ayer, a las 12:30, cuando Branko Zabala llegaba en su auto Nissan Sentra a una notaría a realizar una transacción. Bajó del vehículo y se dio la vuelta para sacar un bolso con la plata que le estaba alcanzando su esposa y de repente un sujeto se le abalanzó con el afán de arrebatárselo, por lo que el dueño del dinero, alto y fornido, peleó con el ladrón, pese a verlo armado.
El delincuente, en desventaja por la mayor envergadura física de su oponente, disparó su pistola 9mm, pero Zabala desvió la trayectoria del proyectil al golpear la mano del desconocido, al que tomó con fuerza y lo estrelló varias veces contra su auto, contra la pared e incluso contra la moto del cómplice, que observaba el lance con el motor encendido, listo para huir. “El de la moto me gritaba ‘¡soltalo carajo, soltalo carajo!’, pero yo no lo largaba. Su pistola se desarmó de los golpes, pero no la largó. Salvé la plata y salvé mi vida”, relató el vecino, que poco antes había retirado el dinero de una casa de cambio del centro.
Zabala resultó vencedor, pero al final del combate se dio cuenta de que su adversario le hizo una herida en la cabeza (cinco puntos de sutura), otra en la región del ojo izquierdo (un punto), moretones en el pómulo del mismo lado, una lesión en la pierna izquierda y escoriaciones en el brazo derecho. Pese a todo, él cree que el ladrón se llevó la peor parte.
Ayer también, a la 1:00, otros delincuentes asaltaron el residencial Yulimar, situado en proximidades de la avenida Tres Pasos al Frente, en la ruta que conduce a la terminal Bimodal. Danil Zeballos, gerente del recinto, informó de que los maleantes sustrajeron Bs 5.000. Añadió que una mujer entró como señuelo indicando que quería alquilar una habitación; en ese instante ingresó un malviviente, encañonó al administrador con una escopeta, lo golpeó con la cacha en la cabeza por resistirse y sacó la plata de la caja.
El otro caso sucedió en la heladería Pícolo, ubicada frente a la plaza Blacutt. Dos malhechores entraron armados, intimidaron a la cajera en presencia de los clientes, sacaron Bs 6.400 de la recaudación de la jornada y se dieron a la fuga en un motorizado que los esparaba afuera.
Miguel Gonzales, jefe de la Felcc, dijo que no recibió la denuncia del residencial, sí la de Pícolo.

ÉPOCA DIFÍCIL

Para evitar un asalto. Aléjese de las paredes, puesto que puede ser la ayuda que el asaltante necesita para cerrarle el paso y perpetrar el asalto.

Prevenga. Cambie de ruta si va en auto o a pie, mude la hora de sus compras y varíe la hora a la que vuelve a casa. Esto dará la idea de ser una persona más impredecible y el asaltante tendrá menos oportunidades de saber sus movimientos.

Medida. Si considera que una persona o un grupo de desconocidos se está acercando hacia usted de forma amenazadora, pida ayuda. Ingrese a algún comercio o súbase a algún transporte público y explique su situación. Grite e indique que alguien pretende asaltarlo.