domingo, 21 de octubre de 2007

GOBIERNO DE EVO MORALES: CIERTO OLOR A PODRIDO !


FOTO: Presidente de Cuba, Fidel Castro, Presidente de Venezuela, Hugo Cha´vez, Presidente de Bolivia, Evo Morales: el eje del mal
Por Cayetano Llobet

El Presidente está instalado en un limbo en el que sólo se siente el incienso de sus aduladores y sólo se escuchan los taconazos de las botas del sargento Chávez. No sabe que el Estado que él cree que dirige y conduce, ¡ya no existe!
Los procesos de desinstitucionalización y de desagregación ya se han convertido en proceso de descomposición. El Presidente cree -por lo menos eso le ha contado uno de sus ministros- que los sucesos de El Alto son una maniobra del Alcalde. Y le han dicho que los alteños están preocupados por la defensa de la moral y las buenas costumbres. El Presidente no sabe, que al igual que otros octubres, las sociedades desagregadas se manifiestan de esos modos. Por eso, sus policías sólo pueden ser espectadores ¡sin pagar entrada!, y nada más que espectadores. ¡Ya no son Estado eficaz, la poblada es superior a ellos!
El Presidente no sabe que ya no manda en la mayor parte del país. No le han contado que el jueves en la noche el Prefecto de Santa Cruz le ha notificado oficialmente, "¡aquí el único Comandante soy yo!". Y cuando el comandante de verdad, usando su legitimidad ciudadana, convocó a sus tropas para el día siguiente, el gobierno, ¡ante la simple amenaza!, tuvo que ordenar el repliegue de su aparato militar. ¡Sus militares ya no son Estado, la ciudadanía es superior a ellos! Su supuesto experto militar, su Ministro Quintana, nunca pensó ¡después de tantos cursos en la Escuela de las Américas!, que la única orden que iba a dar en su vida, ¡era la del repliegue de sus tropas en Viru Viru!
El Presidente no sabe que la mayor parte de los prefectos ya están posesionados en sus regiones y que ellas son su referencia. Él cree que las cosas se deciden en Palacio y no le han contado que las decisiones palaciegas sólo congregan resistencia cívica y regional. No sabe -porque sus aduladores le filtran prensa-, que hace una semana el Prefecto de Cochabamba lo emplazó "a dar la cara", ¡nada menos!, y lo desafió a que lo defina como adversario. En otras palabras, una suerte de "¡aquí estoy, ¿qué pasa?! Y después de la enorme rebelión cochabambina de enero, ¡cuidadito con lo que se responde!
Y al limbo presidencial no han llegado las noticias de su Directiva Constituyente. Doña Silvia Lazarte, ¡perseguida por la justicia! Y los representantes máximos de la "originaria y plenipotenciaria", tuvieron que presentar un recurso para no ser aprehendidos.
El Presidente no se ha enterado de que en agosto y septiembre ordenó ocupar policialmente Sucre. Y su Ministro de Gobierno no le ha contado que él también tuvo que ordenar el repliegue de más de ochocientos policías. Sus policías en Sucre, ¡ya no eran Estado, los chuquisaqueños amenazados por el Presidente -"no saben las consecuencias" - ocuparon su ciudad y fueron más! Y para colmo, los chuquisaqueños se están dando el gusto de "desmasificar" al Prefecto del MAS: ¡o chuquisaqueño o masista!
Y en el limbo no se siente el olor a podrido, ¡para eso sirve el incienso, para ocultar malos olores! Y la podredumbre estatal es siempre la más hedionda.
Qué tal será el olor, ¡que ya ha llegado a Venezuela! Y qué tal será la sensación de descomposición, que el único que se ha atrevido a hablar de la posible caída del Presidente Morales, ha sido ni más ni menos que el "Mussolini tropical".
Y qué tan mal verá la situación de su amigo boliviano, ¡que hasta Vietnam gratis le ha ofrecido! Si hasta el sargento Chávez, acostumbrado a los malos olores, lo siente... ¡es que algo huele a podrido!

FUENTE: http://www.correodelsur.com/2007/1021/reader.shtml?cierto.htma

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