El buen ejemplo de Argelia

Por Sr. Boris Gómez Úzqueda

Recientemente en el congreso Bolivia gas y energía organizado por la Cámara de Hidrocarburos hemos escuchado la interesante ponencia de un ejecutivo de la principal compañía argelina de Oil & Gas, la Sonatrach.
La República Argelina Democrática y Popular o Argelia, es un país del norte de África. Tiene 2.4 millones de Km2 y casi 37 millones de habitantes. Su PIB está basado en 46% en negocios con hidrocarburos, siendo así que más de la mitad del presupuesto del Estado está basado vía impositiva sobre la cadena energética.
Tiene su compañía estatal Sonatrach -un líder mundial en negocios de energía- establecida en 1963 que tiene a su cargo la administración de las reservas de crudo (34%), gas (51%). El año 2008 aperturaron el upstream a inversiones internacionales. Exportaron crudo en 39% y ventas de LNG en modalidad spot al Asia y a Reino Unido.
Mientras en Bolivia el ministro del sector habla de un tímido número de 1000 ó 5000 millones de dólares de inversión, las cifras proyectadas de ese gigante africano para el período 2009-2013 rondan los 63.000 (sesenta y tres mil millones de dólares). Escuché bien la cifra, la leí y pregunté por ella. De ese monto el 62% estará direccionado a planes en upstream (exploración y producción), downstream, (refinación, transporte, comercialización), así como en transporte y negociación fuera de sus fronteras de venta de LNG.
Tienen marcada experticia en negocios de exportación de gas natural licuificado LNG con plantas de licuefacción y barcos metaneros. La compañía integrada a cargo de la cadena hidrocarburífera argelina es la primera compañía del África y la 12ava del mundo en transporte de LNG. Su posición en el Mediterráneo la coloca de key figure en el negocio de venta de LNG.
Las enseñanzas están enfocadas a que toda sociedad comercial debe compartir riesgos y costos, intercambiando sinergias para nuevos negocios que promuevan intereses conjuntos. Es la clave de los negocios que Argelia desarrolla con compañías multinacionales del sector petrolero y gas.
Al 2012 se han planteado, entre otros, un objetivo: alcanzar mejores cifras de exportación de gas a través de sus tres gasoductos principales: MEDGAS que lleva energético a España; GALSI a Italia y el Transahariano que cruzará Argelia, Nigeria y Niger, un gasoducto de 4300 Km que entrará en operación en 2017 y transportará diariamente 20-30 Mmm3d de gas y que llegará a costar más de 12.000 millones de dólares.
La conclusión que deberíamos aprender: Argelia, al margen de sus temas políticos internos, apuntaló una compañía de tipo multinacional en negocios de hidrocarburos, tiene operaciones en muchos países, entre ellos en el Perú en el proyecto de gasoducto Camisea-Lima.
Argelia -para posicionarse como lugar global del negocio energético- tuvo la capacidad de prever el futuro en base a negocios con gas, es pionero en la industria de exportación de LNG con su mercado principal que es Europa -y potencialmente Estados Unidos- su visión fue también para atender a su propio pueblo: la mayor parte de la población tiene acceso al gas, su generación eléctrica es gasista cien por cien y van a incursionar en industrias como petroquímica, de la mano de exportación de LNG, echando mano a sus 120-200 TCF (trillón de pies cúbicos de gas, Bolivia tiene menos de 55) para hacer negocios satisfactorios para su país. Creo que la visión es importante y debiéramos copiarla.

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Boris Gómez es Máster en Administración, consultor del sector energético y ejecutivo de una compañía privada.